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El Fondo de Conservación Vial (Covial) comprometió, en lo que va del año, Q600 millones más de los que tenía presupuestados, lo cual aumentará la deuda flotante para el 2010, en un momento en que el Gobierno ha reducido sus gastos y la recaudación. Diputados y representantes de Transparencia Internacional exigen una explicación.

Un informe de la Comisión legislativa Extraordinaria Nacional por la Transparencia atribuye que Covial adjudicó Q600 millones más, del total de lo que tenía asignado para el 2009.

Según el Presupuesto General de Ingresos y Egresos del Estado, Covial cuenta para este año con Q1 mil 661 millones, pero al sumar las adjudicaciones de obras en lo que va del ciclo —con base en información de esa dependencia—, el monto asciende a Q2 mil 261 millones.

“Asignar dinero sin financiamiento es comprometer los recursos del Estado, además de que es una ilegalidad”, se quejó Rosa María de Frade, de la Bancada Guatemala y presidenta de la sala de Transparencia.

“Esto es una deuda flotante de Q600 millones 581 mil, que repercutirá en el pago a contratistas durante los próximos seis meses del año”, añadió la diputada.

Comprometer más dinero de lo que se tiene presupuestado, según abogados, viola el artículo 26 de la Ley Orgánica del Presupuesto —decreto 101-97—, el cual manda: “No se podrán adquirir compromisos ni devengar gastos para los cuales no existan saldos disponibles de créditos presupuestarios, ni disponer de estos créditos para una finalidad distinta a la prevista”.

Armando Escribá, director de Covial, aceptó que durante el 2009 han trabajado con déficit. “No es una deuda flotante, es un déficit contractual; revisaremos los contratos al final del año, y si no han terminado o han tenido baja ejecución, los porcentajes restantes se trasladarán para el 2010”, justificó el funcionario.

A De Frade le parecieron ilógicas las declaraciones de Escribá. “Es absurdo que pretenda arrastrar una deuda para el próximo año, sin conocer los techos presupuestarios del 2010; además, nos encontramos en una gran crisis financiera”, se lamentó.

El director del fondo reconoció que el problema de la deuda puede traer consecuencias graves para el país. “No solo el compromiso, sino el pago a contratistas y la cobertura de emergencias; no tenemos dinero, y debido a los recortes, nuestro presupuesto descendió a Q1 mil 400 millones”, aceptó Escribá.

Gobierno anterior

El año pasado, las autoridades de Covial se quejaban incesantemente de la deuda flotante que había dejado la administración anterior, y que suma otros Q600 millones sin ser saldados.

“No tiene sentido que este gobierno se lamente de la deuda que les dejó la gestión anterior, si ellos están haciendo exactamente lo mismo”, resaltó Manfredo Marroquín, presidente de Acción Ciudadana (AC).

Culpa al Congreso

Escribá denunció que los causantes del déficit fueron los diputados, quienes incluyeron obras de más en el Listado Geográfico.

“Colocaron proyectos que nosotros nunca pedimos”, se quejó el director.

La presidenta de la comisión de Transparencia admitió que algunos parlamentarios de la sala legislativa de Finanzas del 2008 incluyeron proyectos de mejoramiento —reconstrucción de tramos— para Covial, con la intención de eludir la Ley de Compras y Contrataciones del Estado, ya que la entidad con mayor responsabilidad para la construcción de esas obras es la Dirección General de Caminos.